La dueña de
mi inspiración.
Destello
rizado de color dorado que asoma por la puerta principal a las dos y cuarenta y
cinco del mediodía. Melodía del sonido del motor de tu coche con estribillo
hecho con el giro de la llave al entrar en casa. Sé que eres tú.
Tengo tantas
ganas de verte que a veces no dejo que acabes el estribillo cuando prefiero
terminar la canción abriéndote la puerta. Siempre que lo hago sonríes, y ya
solo por eso merece la pena estar pendiente de esa música.
Eres la
protagonista de la historia de nuestra vida.
Y también
productora, directora y en ciertos momentos guionista.
Y, ¿Sabes
qué? Tengo la sensación de que vas camino del Goya. Parece fácil verte actuar,
y PARA NADA lo es.
Hemos
protagonizado juntos momentos de dolor, de pena y de confusión. Nos hemos
sentido perdidas sin saber encontrar la salida en este set de grabación. Y en
muchos momentos nos cuesta la vida ponernos delante de la cámara, e incluso
dirigirnos hacía ella.
En la vida
se conoce mejor a las personas en los momentos malos que en los buenos. Y
nosotros tenemos la suerte de haber nacido de una persona tan maravillosa como
tú.
Y maravillosa
no es ser graciosa siempre, ni cariñosa, ni comprensiva, ni fuerte, ni
responsable, ni inteligente, ni agradable, ni empática, ni sensible, ni
entrañable, ni risueña, ni espontánea, ni transparente, ni noble, ni eficaz, ni
ágil, ni soñadora…
Maravillosa
es cometer errores y ser capaz de afrontarlos.
Maravillosa
es luchar cada día por ser feliz y tomar decisiones difíciles.
Maravillosa
es ser uno mismo sin importar lo que piensen los demás.
Maravillosa
es saber contar hasta 10 antes de hablar.
Maravillosa
es hacer lo que sea por hacernos feliz.
Maravillosa
es tener el poder de afrontar la realidad.
Maravillosa
es saber levantarse cada vez que tropiezas con la misma piedra.
Maravillosa
es vestirse cada mañana o cada tarde para dar de comer a sus hijos.
Maravillosa
es empezar de cero cuando ya vas por la mitad del camino.
Maravillosa
es saber dejar aparcado el miedo en una esquina para acelerar sin mirar atrás.
Maravillosa
es ser cariñosa sin esperar que te lo den a cambio.
Maravillosa
es saber pedir perdón.
Maravillosa
eres tu entera mamá.
Y
maravilloso es que dediques tu vida a enseñarnos a ser tan maravillosos como
tú.
El barco sin
ti se hunde y te necesitamos al timón. Espero que sigas dirigiéndonos y
enseñándonos como lo haces cada día. Te estaré agradecida siempre.
Porque todo
lo que somos es maravillosamente gracias a ti
¡TE AMAMOS!